Cuando sacrificamos nuestros deseos egoístas para cuidar a alguien más,
remplazamos nuestro destino actual por uno mejor y notablemente menos
caótico.
¿No es gracioso cómo pensamos en esto como un sacrificio? En realidad ¡estamos obteniendo mucho más!
Una de las claves para recibir todo es una disposición a dejar ir todo
No hay comentarios:
Publicar un comentario